Hace muchos años que perdí el ‘miedo’ a cambiar de banco. Muchos clientes piensan que el cambio es engorroso, que pierdes demasiado tiempo (y el tiempo es dinero) y que nunca sabes bien lo que te vas a encontrar en el nuevo banco. Bueno, algo de cierto hay en ello. Siempre se va a perder algo de tiempo en hacer una gestión y no hay nadie que te pueda garantizar al 100% que el cambio va a ser positivo, pero todo depende del ‘cariño’ que le tengas a tu dinero. Yo, personalmente, le tengo bastante, porque sé lo que cuesta ganarlo. Y seguro que tú también lo sabes.
Así que en los últimos tiempos he pasado por algunos bancos, incluso en ocasiones he tenido cuentas en varios bancos a la vez porque me convenía (a lo mejor un banco me ofrece buen rendimiento para mi nómina y otro para su tarjeta de crédito), pero desde hace meses me decidí por cuenta evo banco para todos mis gestiones financieras. ¿Por qué EVO?
Porque una vez analizadas sus ventajas encontré que me ofrecía el mejor servicio. Primero porque quería una cuenta sin comisiones ni de mantenimiento ni a la hora de hacer transferencias. Para mí es algo básico. Entiendo que otros bancos cobren comisiones si su enorme cartera de clientes se lo permite, pero para bancos más modestos, es necesario atraer a los clientes con ventajas de este tipo, como es el caso de EVO.
Por otro lado, está el hecho de que ofrece una tarjeta que tiene un excelente rendimiento fuera de España. Para alguien como yo que viaja mucho, este factor es decisivo. Por experiencia con otros bancos, tenía claro que quería un buen servicio internacional y EVO me lo proporciona.
Y otro aspecto que también influyó en mi decisión fue el servicio online. Soy de los que prefiere hacerlo todo desde el móvil que acudir a una oficina y con mi cuenta evo banco tengo la posibilidad de hacerlo todo online. Es verdad que, en ocasiones, te encuentras con algunas incidencias, pero tienen un buen servicio de atención telefónica para estos casos.