¿Visitar una isla solitaria y dormir al pie de sus orillas arenosas? Aunque esta experiencia es un ‘sueño hecho realidad’ en las Cíes, existen diferentes requisitos y obstáculos burocráticos que pueden complicar esta escapada: desde la reserva de billetes en barco y del camping hasta la tramitación de una autorización en la Xunta de Galicia. Con todo, no es un sueño inalcanzable.
En primer lugar, la cuestión del alojamiento pueden solventarse fácilmente reservando en bungalows cies en el municipio de Baiona u otros en las inmediaciones de estas islas, pertenecientes al Parque Nacional Marítimo Terrestre de las Islas Atlánticas. Con todo, la perspectiva de dormir bajo el cielo estrellado de las Cíes seduce a los turistas, por lo que es lógico que consideren la opción del camping situado dentro de la isla.
Este camping permanece abierto durante la temporada alta, y debido a la afluencia de visitantes que recibe durante este periodo, tramitar la reserva con antelación es indispensable para no recibir un «no» por respuesta. Si bien las islas Cíes carecen de instalaciones permanentes, este camping dispone de terraza, comedor y cafetería restaurante, donde grandes y pequeños podrán degustar los platillos típicos de la costa gallega.
Solventada la problemática del alojamiento, queda la del desplazamiento hasta la isla. Numerosas navieras en el Puerto de Vigo y otros alrededor de las Cíes ofrecen servicios de transporte hasta este destino. Por las razones antes citadas, se recomienda reservar con antelación.
Por último, los viajeros no deben olvidar solicitar el permiso de visita que el personal responsable les exigirá al desembarcar en las islas Cíes. Esta autorización, que debe tramitarse en la web oficial de la Xunta de Galicia, requiere únicamente el nombre del interesado y su documento nacional de identidad. Carece de coste, pero debido a la alta ocupación de las Cíes, se aconseja realizar este paso con varias semanas de antelación.