La fotografía en el cine es tan importante que puede hacer que una película sea una buena historia sin más o se convierta en una obra artística con gran personalidad. Por eso, se crean especialidades como el Master en Fotografía Artística y Documental en Madrid en el que se forman a grandes profesionales capaces de crear arte en el cine. Pero no solo en la imagen en movimiento, sino que estos estudios también capacitan al alumno para contar historias a través de la imagen fija de una manera muy personal.
El jefe de fotografía en una película se encarga de aspectos tan importantes como el de organizar a los cámaras, decidir los encuadres, planificar las luces o conseguir las composiciones perfectas. El director también tiene mucho que decir en todo esto, pero será el jefe de fotografía el que se encargue de hacer realidad el proyecto del director.
Por eso, director y jefe de fotografía deben de estar en una misma onda creativa y ser capaces de comunicarse muy bien ya que tienen que colaborar estrechamente para conseguir que la película tenga esa personalidad que el director espera y el toque artístico que el jefe de fotografía desea.
Para lograrlo, el jefe de fotografía tiene que conocer a fondo las cámaras y saber qué posibilidades le ofrecen, qué ángulos pueden tomar y cómo responden a la luz. Si se consigue todo esto junto con una buena dirección y un guión impactante, el resultado es una obra sólida y poderosa que consigue quedarse en la retina del espectador, yendo más allá de la simple historia.
Un buen diálogo y una historia de peso apoyados en imágenes poderosas consiguen un resultado que solo va a tener una posible calificación, el de obra maestra. Y alcanzar esto ese consigue con una gran preparación de base, una experiencia cimentada en un gran trabajo y un entendimiento perfecto con el director y el resto del equipo, sobre todo el que realiza funciones de imagen.
Además de en la película en sí, la fotografía también puede ser muy importante en otro proceso relacionado íntimamente con el mundo del cine: la creación de las portadas de las películas. Algunas tan bien conseguidas que se han convertido en iconos y que están en la mente de todos como grandes ejemplos de obras de arte. Incluso se utilizan para decoración y los originales se coleccionan.