Por fin empieza el colegio y los niños ya van a estar entretenidos, porque en verano hay muchos padres que como tienen que trabajar no pueden atender bien a sus hijos, normalmente son los abuelos los que se encargan de cuidar a los nietos en verano, ya que ambos están libres. Eso de que los abuelos se ocupen de los nietos lo veo bien por un lado, ya que se hacen compañía unos a otros, los abuelos también necesitan estar acompañados y quién mejor que sus nietos para hacerles compañía. Pero por otro lado veo que muchos padres se escudan demasiado en los abuelos para cuidar de sus hijos y hay muchos abuelos que ya han criado a sus hijos y no quieren tener que criar a los hijos de sus hijos por obligación. Si los cuidan es porque ellos quieren y no porque se les obligue.
Con la llegada del colegio llegan los gastos de la compra de los libros y del material necesario para poder asistir al colegio. En la tele insisten todos los días en lo que cada familia tiene que gastarse y me parece una salvajada lo que cuestan los libros de texto, se aprovechan de algo que debería estar al alcance de todos y por desgracia no es así. El otro día salía en la tele como gente vendían sus libros viejos de texto en la calle para así poder sacarse un dinerillo extra. Y otra señora decía que las editoriales no estaban de acuerdo con que los mismos libros de texto tuviesen más de cinco años de vigencia, pero los padres de los niños preferían que los libros durasen todo el tiempo que fuese posible.
Por lo que recuerdo de la vuelta al colegio son las peleas que tenía con mi madre cuando llegaba la hora de tomarme la leche entera en el desayuno, todos los días era la misma historia y todo porque nunca me ha gustado la leche. Supongo que hoy en día seguirá pasando lo mismo con otros niños con sus madres ya que los gustos de los niños no han cambiado nada y la leche no creo que esté entre los sabores favoritos de los niños.